Reflexología podal y tercera edad

La reflexología podal como suave y eficaz toque para las personas mayores y frágiles

Aunque se han encontrado muchas técnicas de masaje para aliviar el dolor, la reflexología y el masaje de pies y piernas puede ser especialmente efectivo para las personas mayores que no pueden tolerar otras formas de masaje.  La reflexología no es invasiva y está considerado como un tratamiento con «frontera de seguridad», es decir que respeta el espacio personal y la dignidad de los ancianos que no pueden recibir otro tipo de masaje.

La mayoría de las personas mayores se sienten cómodos con recibir tratamiento en los pies. Con excepción de los zapatos y los calcetines, es lo único que se debe retirar con el fin de proporcionar el efecto enriquecedor contacto con la piel. El tratamiento les transmite honor y respeto. Habremos de tener en cuenta que no solamente podemos utilizar la Reflexología para tratar enfermedades especificas sino que también se la puede tener como una forma de mantenimiento de nuestros pies y de todo nuestro organismo.

Mejorar el estado físico a través de los pies

La reflexología  y el masaje en los pies y en las piernas contribuye tanto a la mitigación de la sensación física de dolor y la percepción individual de la experiencia del dolor. En las personas mayores, la reflexología aplicada con delicadeza, buena escucha y cuidado, resulta muy beneficiosa para mejorar y regular las funciones motoras e intestinales, así como para el aumento de la capacidad respiratoria y eliminación de toxinas.

Los beneficios generales incluyen:

• Relajación. El masaje en los pies crea un poderoso efecto de relajación en el cuerpo, el cual es percibido de manera prácticamente instantánea.
• Control de la ansiedad. Unido al beneficio anterior, un buen masaje en los pies ayuda a controlar la ansiedad y ponerla en un estado que te permita manejarla.
• Alivio del dolor por estar de pie, exceso de ejercicio, etc. Los pies son unas de las partes del cuerpo que realizan más actividad física y, obviamente, la parte que soporta más peso. Es común que tus pies te indiquen, mediante el dolor, que necesitas cuidarlos más. Un buen masaje es una gran manera de darle cariño a esos tejidos doloridos.
• Mejora la presión arterial. El masaje relajante controla la presión de la sangre y el ritmo cardiaco en el momento en que es realizado.

Además:

• Proporciona una sensación de seguridad, bienestar y paz.
• Ayuda a aliviar la tensión emocional.
• Estimula los puntos reflejos en los pies, mejorando el equilibrio de todo el cuerpo.
• Abre y estabiliza el flujo de energía a través del cuerpo.
• Restablece y aumenta la circulación sanguínea.

Nuestros pies necesitan caminar descalzos y agradecen un masaje reflexológico con cierta regularidad, evitando de esa manera la acumulación de tensión y estrés en ellos y les permite descargar toda la tensión que han ido acumulando con el correr de los días. Evitaremos así la principal causa de la enfermedad: el cansancio generado por el estrés y el debilitamiento añadido que ello conlleva. Escuchar los mensajes de nuestro cuerpo tiene premio: El Bienestar y la Salud.

Es muy recomendable que nuestros familiares y amigos de la edad de oro puedan recibir una vez al mes este enriquecedor tratamiento que les ayudará a sentirse mejor, queridos y apreciados.

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